S&P Global Ratings proyecta una contracción del 8,8% para el PIB
S&P Global Ratings actualiza sus previsiones de crecimiento mundial y rebaja sensiblemente sus perspectivas para España. Según el equipo liderado por su economista jefe, Paul Gruenwald, nuestro país sufrirá una contracción económica del 8,8% en 2020, mucho más profunda del 8% que baraja el Fondo Monetario Internacional.
No obstante, si la pandemia logra controlarse y la actividad económica vuelve a recuperar poco a poco la normalidad, la agencia de calificación espera que el PIB de España crezca un 5,1% en 2021 y un 4,3% en 2022. Las perspectivas actualizadas publicadas el jueves indican una contracción del 7,3% para la eurozona en el año en curso y del 5,2% para Estados Unidos.
De esta forma, Gruenwald ofrece una perspectiva muy sombría a corto plazo para la economía global, que se contraerá un 2,4% en 2020. Desde su punto de vista, la duración y el ritmo de la recuperación dependerán de la combinación de las políticas sanitarias y económicas implementadas; la respuesta y confianza de los consumidores y las empresas; así como las condiciones del mercado laborales, especialmente por el impacto de la pandemia para las pequeñas y medianas empresas.
El economista jefe de S&P Global Ratings considera que es poco probable que la actividad económica de la zona euro se estabilice para finales del segundo trimestre. De hecho apunta que las fronteras exteriores de la UE podrían no reabrirse por completo a tiempo para la temporada turística de verano. Además, recuerda que el cese de la actividad y el distanciamiento social no afectan a la economía de forma lineal: cuanto más largos son, más afectan a las decisiones de inversión, ponen en riesgo el tejido económico y reducen las perspectivas del PIB.
Las nuevas previsiones de S&P Global Ratings observan una disminución en el PIB real anualizado de EEUU del 7,6% para el primer trimestre de 2020 y del 35% (anualizado) en el trimestre en curso, lo que se traduce en una disminución del 11,7% del pico al mínimo de la crisis económica derivada de la pandemia del coronavirus. También espera que la tasa de desempleo a este lado del Atlántico alcance el 19% en mayo, la más alta desde 1948, y que la Reserva Federal mantenga las tasa de interés en el 0 y 0,25% por lo menos hasta 2023.