Secretario de Energía de EE UU renunció en medio de la polémica sobre su papel en Ucrania
El secretario de Energía de EE UU, Rick Perry, comunicó este jueves al presidente estadounidense, Donald Trump, que abandonará pronto su cargo, en un momento de creciente polémica sobre su papel en las presiones de la Casa Blanca a Ucrania para que investigara al ex vicepresidente Joseph Biden.
Medios locales informaron que Perry avisó a Trump de su renuncia en el avión presidencial que llevaba al mandatario a Texas, aunque la dimisión no tiene un efecto inmediato y no está claro cuándo abandonará el cargo.
Perry, uno de los pocos miembros del gabinete original de Trump que siguen con él, llevaba tiempo pensando en dejar el puesto, incluso desde antes de que estallara la controversia relacionada con Ucrania, que han motivado la apertura por parte de los demócratas de una investigación previa a un posible juicio político a Trump.
Sin embargo, Perry ha acaparado titulares en las últimas semanas por haber formado parte del trío encargado de la política estadounidense en Ucrania, conocido popularmente como los «tres amigos» e integrado también por el embajador de EE.UU. ante la Unión Europea (UE), Gordon Sondland, y el exenviado especial para Kiev Kurt Volker.
En una entrevista este miércoles con el diario The Wall Street Journal, Perry reconoció que estaba en contacto con el abogado personal de Trump, Rudy Giuliani, en los temas relacionados con Ucrania, lo que ilustra el grado de influencia de ese letrado en la política exterior estadounidense hacia ese país.
Perry explicó que él estaba tratando de facilitar una reunión entre Trump y el presidente ucraniano, Vladímir Zelenski, pero el mandatario se negaba a ello y le pidió contactar a Giuliani para que éste le explicara sus preocupaciones relativas a la «corrupción» en Ucrania.
Sin embargo, Perry afirmó que ni Trump ni Giuliani ni el Gobierno ucraniano hablaron con él sobre la posibilidad de investigar a Biden o a su hijo Hunter, algo que el mandatario estadounidense planteó durante una llamada telefónica con Zelenski en julio.
El aún secretario de Energía está bajo la lupa de los investigadores demócratas en la Cámara Baja y tiene hasta este viernes para cumplir con citaciones judiciales para entregarles documentos sobre su papel en la política hacia Ucrania.
Sondland compareció hoy a puerta cerrada ante esos investigadores y confirmó el destacado papel en la política hacia Ucrania de Giuliani, el principal instigador de la teoría de que Biden y su hijo incurrieron en corrupción en Ucrania.
«Nos decepcionó la orden del presidente de que involucráramos a Giuliani», indicó Sondland en su testimonio, filtrado a la prensa.
Perry aseguró este miércoles al diario neoyorquino que planeaba permanecer en su cargo al menos hasta finales de noviembre, pero no dio garantías de seguir más allá, y fuentes cercanas a él aseguraron al periódico The New York Times que el funcionario planea buscar oportunidades en la industria energética que ahora supervisa.
De 69 años, Perry fue gobernador de Texas a comienzos de esta década y ha mantenido una buena relación con Trump, que llegó a considerarle en los últimos dos años como posible jefe de gabinete y secretario de Seguridad Nacional.