Lagarde defiende al BCE
En mitad de la crisis institucional que ha abierto el Tribunal Constitucional (TC) de Alemania, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, ha declarado, sobre el fallo del Tribunal Constitucional de Alemania, que “somos independientes y continuaremos haciendo lo que sea necesario, lo que sea necesario para cumplir nuestro mandato, sin inmutarnos”. Se habían generado dudas, si la sentencia alemana podía limitar al BCE a aumentar el actual programa de compra de deuda de 750.000 millones por la pandemia. La presidenta y el vicepresidente del BCE han despejado hoy todas las dudas.
“Los bancos centrales, incluido el BCE, se guían por su mandato, por lo que haremos todo lo necesario para cumplirlo”, ha asegurado la presidenta del BCE durante su participación en un acto organizado por Bloomberg, añadiendo, al ser cuestionada sobre el dictamen del Constitucional alemán, que la institución seguirá adelante “sin inmutarse”.
“Nuestro mandato dicta que hagamos todo lo necesario y todo lo que haga falta para cumplir nuestro propósito”, ha afirmado Lagarde, subrayando las excepcionales circunstancias y el ‘shock’ sin precedentes que atraviesan actualmente la economía mundial y la eurozona, lo que hace claramente necesario ir más allá de las herramientas normales y convencionales.
La banquero ha subrayado que uno de los riesgos de la actual situación es que haya un segundo brote del coronavirus.
El vicepresidente del Banco Central Europeo, Luis de Guindos, ha defendido, hoy en el Parlamento Europeo, que el banco “está más decido que nunca a garantizar condiciones financieras favorables en todos los sectores y países para permitir que se absorba este shock sin precedentes”.
“Estamos listos para hacer más ajustes a nuestras medidas de política monetaria si vemos que la escala del estímulo está por debajo de lo que se necesita”, ha dicho Guindos en la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo. Y ha defendido que el el programa contra la pandemia está ayudando a prevenir el endurecimiento indebido de las condiciones financieras.
El fallo del TC germano, dando tres meses al BCE para explicar el programa de 2015 y demostrar su proporcionalidad, había generado cierta incertidumbre y nerviosismo por la posible respuesta del banco ante la actual crisis, aunque la mayoría de analistas apostaban por un aumento de la potencia de fuego pese a la sentencia.
La intervención de Guindos llega dos días después de que TC sorprendiera a todo el mundo con una dura sentencia sobre la legalidad de la intervención del BCE en 2015 para comprar deuda soberana en el mercado. Los jueces alemanes dictaron que el PSPP, las siglas en inglés del programa, no violaba las normas para financiar a los estados, pero atizaron al banco central y exigieron una evaluación del programa en tres mes con la amenaza de retirar al Bundesbank del esquema del programa, que todavía está en vigor.
Al ser preguntado el vicepresidente por el fallo alemán, ha respondido que el BCE está bajo la jurisdicción del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), tal como dijo la propia institución en un comunicado el mismo día de la sentencia. El banquero español ha defendido la convicción con la que actúa el banco central para cumplir con su mandato de estabilidad de precios.
“Somos responsables, tenemos que responder ante el parlamento de la UE, ustedes son los representantes del pueblo europeo”, ha añadido. Además, ha subrayado que “hay una cantidad importante de análisis sobre las decisiones que se han tomado”, ante la pregunta de si el BCE actuó con proporcionalidad, algo que pone en duda el tribunal germano. Guindos ha señalado que siempre evalúan los efectos secundario y se documenta la proporcionalidad antes de cualquier decisión política.
El número dos del BCE ha reclamado un papel más importante de la política fiscal en la lucha contra la recesión, diciendo que la política del BCE necesitaba ser respaldada. “Por lo tanto, es vital que la respuesta fiscal a esta crisis sea lo suficientemente contundente en todas las partes de la zona del euro. Ahora debe haber un acuerdo político para construir los instrumentos apropiados para esta respuesta común”.
“La política del BCE ha proporcionado un apoyo crucial a la economía”, ha remarcado, aunque ha admitido que la inflación caerá en los próximos meses, una mala señal para la economía.