El FMI avisa del impacto económico de la crisis social en Latinoamérica
Mientras el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, rubricó finalmente el acuerdo comercial entre su país, México y Canadá, más conocido como T-MEC o USMCA, por sus siglas en inglés, en una pomposa ceremonia en la Casa Blanca, el Fondo Monetario Internacional reducía su previsión del crecimiento del PIB mexicano en 0,3 puntos porcentuales, hasta un 1% para este año.
La economía mexicana debería estabilizarse a medida que el T-MEC entra en acción. Trump sacó pecho el miércoles al recordar que ha cumplido con su promesa y luchado por defender al trabajador estadounidense. “Dos décadas de políticos se postularon para el cargo prometiendo reemplazar el Tratado de Libre Comercio de America del Norte (TLCAN o NAFTA, por sus siglas en inglés) y ni siquiera lo intentaron”, insistió el mandatario.
México, al igual que Argentina, se encuentran entre los países de América Latina que servirán de lastre para la región, según informó el miércoles la institución. Un rezago que llega después de que el año pasado la economía latinoamericana en su conjunto quedase estancada con un tísico crecimiento del 0,1%.
En su primera radiografía en profundidad para 2020, el Fondo indicó que los países de América Latina presentarán un crecimiento en su conjunto de 1,6% este año, una baja 0,2 puntos porcentuales frente a su reporte de perspectivas de octubre. El próximo año, la actividad debería registrar un avance del 2,3%.
No obstante, el director del FMI para el Hemisferio Occidental, Alejandro Werner, estimó que el escenario actual plantea nuevos retos y la urgencia de una reactivación. “El PIB real per cápita de la región ha disminuido 0,6% por año en promedio durante el período 2014-2019”, señaló el economista, destacando el contraste con un aumento de 2% durante el periodo de auge de las materias primas entre 2000 y 2013.
Para Argentina, el FMI espera una contracción de 1,3% en 2020
Chile, uno de los países más estables en Latinoamérica, se vio sacudido en octubre por una oleada de protestas sociales contra el sistema económico, que dejaron decenas de muertos, dañaron la infraestructura pública y alarmaron a los inversores. El PIB chileno creció apenas 1% en 2019, según el FMI y avanzará un 0,9% este año.
“Si bien las causas de las tensiones sociales varían de un país a otro, éstas en general reflejan una insatisfacción con ciertos aspectos de los sistemas económicos y políticos”, indicó el Fondo en un comunicado publicado el miércoles, en el que añadió que una clave para reactivar el crecimiento “es hacerlo más inclusivo”.
En Argentina, donde acaba de asumir un nuevo Gobierno que negocia una compleja reestructuración de su deuda, el FMI espera una contracción de 1,3% en 2020 y una recuperación a 1,4% el próximo año, sin cambios frente a las estimaciones de hace tres meses.