El Banco de Japón inyecta 5.918 millones
El Banco de Japón (BoJ) ha realizado hoy viernes una inyección en el sistema financiero de 700.000 millones de yenes (unos 5.918 millones de euros/6.631 millones de dólares) a través de compra de bonos soberanos, para mitigar la volatilidad en los mercados por la pandemia de coronavirus.
El miedo al impacto económico que provocará el Covid-19 está obligando a los bancos centrales a redoblar sus estímulos. Ayer mismo adelantaba Bloomberg que el BoJ ampliará el alcance de sus medidas en la reunión prevista para la próxima semana.
Por ahora, el banco central nipón ha efectuado esta aportación masiva de liquidez en dos tramos durante este viernes. Lo ha hecho en una jornada de extrema volatilidad para la bolsa de Tokio en la que su principal indicador, el Nikkei 225, ha llegado a desplomarse más de un 10%. Al cierre de la jornada ha perdido un 6,08%.
Horas antes, el banco central de Estados Unidos, la Reserva Federal (Fed), sacó todo su arsenal ante la debacle bajista que sufrió el jueves Wall Street y el resto de bolsas mundiales: anunció futuras inyecciones de liquidez por 1,5 billones de dólares.
También el Banco Central Europeo (BCE) decidió en su reunión de política monetaria de ayer incrementar la liquidez y sus estímulos en 120.000 millones de euros. Sin embargo, el eurobanco no tocó los tipos de interés. Algo que el consenso de mercado daba por hecho previamente después de los recortes llevados a cabo en los días anteriores por la Fed y el Banco de Inglaterra (BoE, por sus siglas en inglés).
El Nikkei de la bolsa tokiota ha caído con fuerza en la última sesión de la jornada tras el arranque y llegó a perder la barrera psicológica de los 18.000 enteros por primera vez desde noviembre de 2016, cuando el Reino Unido gestaba el Brexit, su salida de la Unión Europea.
A lo largo de la sesión, el índice referencial moderó su desplome y recuperó terreno, aunque al final terminó con un retroceso del 6,08%.
El parqué tokiota vivió así otra jornada marcada por el pánico después de que Wall Street cerrara en la víspera con un hundimiento del 10% de su índice principal, el Dow Jones de Industriales, tras la suspensión de los viajes desde Europa a Estados Unidos y pese a la drástica inyección de liquidez anunciada por la Fed.
Además de la reunión de emergencia convocada hacia mitad de sesión por el Ejecutivo y el banco central, el titular nipón de Finanzas y viceprimer ministro, Taro Aso, compareció para hacer un llamamiento a la calma.
“La preocupación por el futuro incierto es uno de los factores del fuerte movimiento en el mercado. Sin embargo, la situación financiera de las empresas japoneses no está mal, independientemente de su valor en bolsa”, dijo Aso.